Abundando en nuestro comentario anterior
sobre los epicenos que, siendo unisex --y habiéndose dado incluso festejos
ensalzando lo unisex--, deberían respetarse como instrumentos para la mejor precisión en el lenguaje, indicaremos, en relación con el título que hoy aparece en un destacado periódico --y que recogemos al margen--, que no se puede decir “nueva
primera ministra” al referirnos a que una mujer, por segunda vez en la historia
de Reino Unido, será nombrada para el cargo de Primer Ministro.
Debería decirse, más acertadamente, “nueva Primer Ministro”.
Lo de
“nueva primera ministra” ninguna descripción concreta hace del cargo
concreto que ocupará la Sra. May: “primera
ministra” significa literalmente que
‘una’ ministra resulta ser la ‘primera
en algo’ (por ejemplo, en jugar al golf). Y en este caso, además,
tampoco se entendería bien lo de ‘nueva’: si es ‘la primera’, es que no hay otra antes; y entonces no es que sea ‘nueva’ (u ‘otra más’), sino
--simplemente-- ‘la primera’.
No sucede igual si dijésemos “nueva Primer Ministro”: aquí el cargo es inequívoco, y también el que
esto ya pasó antes.
En
cambio, distinto --y aceptable-- habría sido decir “nueva jefa de Gobierno”,
como alternativa a lo más respetuoso y
más correcto: “nueva Jefe de Gobierno”. Donde
‘jefa’ ha de ir en minúscula (por ser sustantivo general), mientras ‘Jefe’, con mayúscula por ser el nombre propio del cargo.
Peso-Press
No hay comentarios:
Publicar un comentario